domingo, 15 de junio de 2014

Supersticiones de un día mágico (15/06/2010)

Recuperación del artículo que escribí el 15 de Junio de 2010 cuando el Baskonia ganó su tercera liga. Publicado en la web del Baskonia

SUPERSTICIONES DE UN DÍA MÁGICO

Son las 7:30 de la mañana y suena el despertador. No me cuesta levantarme porque en mi mente suena como un martilleo un nombre, un sentimiento, un carácter, un EQUIPO, sí, EQUIPO con mayúsculas , no es otro que mi querido BASKONIA.

Empiezo a pensar que quizás por alguna circunstancia rara de esas que hay en la vida y por la cuadratura del circulo y la alineación de diferentes planetas en el universo infinito tengo que repetir cada uno de los pasos que hice el jueves pasado ,cuando empezó todo ,porque si salió todo bien ese día ¿Por qué no hacer lo mismo hoy para que salga todo perfecto? Así que me pongo a recordar......¿que me puse? ¿los calzoncillos azules, los verdes, los morados.....? Joder, no me acuerdo, esta memoria .......Cojo unos esperando acertar. Lo que sí que sé es que llevé unos vaqueros y una camisa blanca de manga larga, la diferencia es que el jueves hizo 22 grados y hoy tiene pinta de hacer 32, es lo que tiene vivir en Málaga

Me pongo los vaqueros, busco la camisa en el armario y respiro tranquilo ¡¡¡ ahí está !!! Me la pongo y me dispongo a llevar a la niña al cole. Ella que es un poco cabezona, como el padre, se empeña en ir por otro sitio, hago memoria....¡¡¡ no ,no ,el otro día fuimos por la otra acera!!! Se lo intento explicar pero ella, lógicamente, no lo entiende, aunque acaba cediendo a cambio de unas chuches cuando salga del cole.
Voy a desayunar al sitio de siempre ¡¡¡No, la mesa donde me senté el jueves esta ocupada !!! El camarero me mira incrédulo, estoy de pie esperando a que esa mesa quede libre, hay otras, sí, pero yo quiero esa mesa.
Después de 1 minuto ,que parece toda una vida ,el hombre que estaba allí desayunando se levanta y se va. Me siento y pido lo de siempre.
Salgo del bar y me dirijo a hacer las compras, empieza a subir la temperatura y la camisa de manga larga empieza a sobrar, pero aguanto como un campeón ,como mi equipo del alma.


La mañana sigue tranquila, voy a comprar el pan y debido al calor tengo unos coloretes que parezco Heidi, la panadera no me dice nada porque tengo cara de estar totalmente concentrado para un acontecimiento de gran magnitud, pero se queda con las ganas de decir que estoy chalado por llevar una camisa de manga larga con 30 grados a la sombra, seguro que no se lo calla y se lo dice a mi vecina.....

Llega la hora de comer y como si fuese una poción mágica hago la misma comida que el otro día, garbanzos. ¡¡¡Leches!!! Entre la temperatura, la camisa de manga larga y los garbanzos me va a dar un "jamakuko", pero sarna con gusto no pica .
Después ,debido a la pesada comida y al calorcito, me entra sueño, no le doy más importancia, el jueves me pasó lo mismo, eso sí, media hora justa, ni 29 ni 31 minutos, 30 justos .Me pongo hasta el despertador, para que todo vaya milimetrado.

Entre una cosa y otra, siempre midiendo mis movimientos para que todo sea exactamente como el jueves y ante las miradas incrédulas de mi mujer (que en el fondo estoy seguro de que esta pensando que es mejor llamar a los loqueros y terminar con esto cuanto antes) y mi hija, empieza el partido.

Voy derecho al sofá ¿Dónde me senté exactamente? ¿aquí? ¿allí?,un juguete de la niña amenaza mi sitio, le miro desafiante....¿pero que hago? ¡¡¡Es un juguete!!! ¡¡¡No se va a mover solo!!! Lo cojo y lo dejo cuidadosamente en su sitio, no vaya a ser como Chuky el muñeco diabólico y a mitad del partido le dé por comerse la tele o atacarme.

Tengo cuatro anillos de plata,siempre los llevo puestos aunque a veces me los quito para hacer algunas cosas ,una pregunta ronda por mi cabeza, ¿los llevaba puestos el jueves? Creo que sí, me los pongo y......canasta de Fran Vázquez, igual no los llevaba......me los quito......y canasta de Navarro, pienso, igual los llevaba y me los he puesto en dedos diferentes, me los cambio de dedos y.....canasta de Splitter ¡¡¡¡He acertado!!! Muevo la lata de coca cola, ahora aquí, canasta de Morris, ahora allí, canasta de Teletovic, parezco un antenista buscando la posición adecuada para pillar los canales de la tele.


Acaba el partido, las lagrimas caen sobre mis mejillas, mi mujer me da un beso y me dice al oído ¡¡¡Felicidades campeón!!! Yo no tengo palabras ni para decirle gracias, empiezo a llamar a todo el mundo, mi padre es el primero, el jugó en el Vitoria y en el Baskonia cuando empezó todo y estoy seguro que habrá disfrutado, desde el sufrimiento, como el que más. Luego un toque a mis amigos. Una sonrisa ilumina mi cara acordándome cuando era pequeño, jugaba al baloncesto y los sábados a la tarde iba con mis padres al viejo Mendizorroza a ver a mi querido Baskonia ....¡¡¡Como me gustaría teletransportarme y aparecer en Vitoria!!! Pero eso es imposible, así que me resigno, pero disfruto de este momento, que aunque sea en la lejanía, sigue siendo mágico.


También, mas fríamente, me pongo a pensar y llego a la conclusión de que el jueves no me puse esta camisa blanca que a estas horas esta para tirar debido al sudor de los nervios y al calorazo malagueño, que ni siquiera me puse los calzoncillos azules de hoy sino los de colorines y que dudo mucho que comiéramos los malditos garbanzos que me han estado repitiendo toda la tarde-noche, pero no me arrepiento de haber hecho todas estas locuras, ya que hacer locuras por algo que quieres y algo en lo que crees, es menos locura, es más ,creo que es un placer haberlo hecho por ti, BASKONIA.


Por último pienso que lo que mueve montañas no es la superstición, sino la FE, la FE que ha demostrado este equipo por el que ningún "entendido" de baloncesto de este país daba un duro en esta final.
Por eso para finalizar solo quiero decir GRACIAS BASKONIA, no por haberme hecho feliz a mí, sino por hacer feliz a toda la gente que durante años te llevamos en el corazón y por haber demostrado que lo imposible puede ser posible. GRACIAS.





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